Tres clásicos

Por Camila Galfione

Esta semana de la moda parisina dio mucho que hablar. Lily Rose Depp cerró el desfile SS17 de Chanel. Fue la primera vez que Pier Paolo Piccoli, director creativo de Valentino, se encargó en su totalidad del desfile de alta costura dado que antes, compartía el puesto de dirección con Maria Grazia Chiurique, desde el año pasado, está formalmente como cabeza creativa de Dior, firma especialmente aclamada en esta PFW.

El desfile de Chanel se realizó en el Grand Palais y, para esta ocasión, Lagerfeld se inspiró en los espejos y los reflejos. El metalizado y los brillos estuvieron sumamente presentes en la colección y las modelos caminaron sobre espejos, dado la sensación de estar flotando en el infinito. La hija de Johnny Depp y la ex modelo francesa Vanessa Paradis, Lily Rose, cerró el desfile con un voluminoso y romántico vestido rosado, de la mano de el créateur.

 

Piccoli se inspiró en los sueños, no como una fantasía sino como algo que forma parte del hombre y de la esencia de cada persona. Los mitos y las leyendas griegas son, según el diseñador, “la primera vez en la historia en donde se les da un nombre a los sentimientos”, por lo que, también fueron parte de su inspiración. El resultado fue una colección sencilla, elegante y con mucho movimiento. Los plisados, las transparencias superpuestas a telas metalizadas y una paleta con tonos pastel acentuada por el rosso valentino, fueron algunos recursos de la colección.

“Un laberinto, irregular, casi impenetrable, como un jardín secreto”, cuenta la firma que fue la imagen inspiradora de Chiuri a la hora de crear Dior HC SS17. El evento fue un verdadero cuento de hadas. Entre luces de la puesta en escena y el brillo de los vestidos, un halo de magia recorría todo el lugar. Se podría decir que fue la combinación perfecta entre lo romántico y lo gótico, con silueta Dior.

 

Enero, 2017.