Una creativa emprendedora 

Por Camila Galfione

Milagros Bonasso es una creativa y joven emprendedora. Estudió algunos años diseño de modas en Pablo Gimenez, tiene la firma de trajes de baño masculinos llamada Embi, tuvo otra de bijoux Madre Perla Pulseras, pero dejó todo en stand by para lanzar una de joyas bautizada con su propio nombre.

Bonasso comenzó un mes atrás a estudiar orfebrería, tomando clases particulares tres veces por semana. Llega a cada clase desbordada de ideas y su profesor le enseña cómo realizarlas en la práctica.

A Milagros siempre la apasionaron los accesorios, además de tener su firma de bijoux, realizó líneas para marcas locales como Magma, Caro Criado y Vdamiani. Con su nuevo proyecto el objetivo es comenzar a producir un nivel más importante de accesorios como lo son las joyas, sin perder la impronta artesanal que la caracteriza.

La diseñadora se encarga de todo el proceso de elaboración de sus piezas. Pasa horas pensando en cómo serán sus modelos haciendo prototipos y luego los cala, los suelda y los pule por su cuenta. Comenzó trabajando en plata pero ahora realiza sus diseños en latón, alpaca y bronce, a menos que tenga algún pedido especial. La artesana piensa hacer algo más rococó a futuro pero sin incluir materiales fuera de los metales.

La firma se destaca por la exclusividad de sus alhajas, dado que a su diseñadora no le entusiasma repetir modelos: tiene cinco básicos y los demás varían. El estilo de la marca es el de su ecléctica emprendedora, que realiza accesorios que ella misma usaría, algunas más valientes que otras, pero todas con una gran dosis de creatividad. Cuenta que también disfruta de hacer joyas a pedido, inspiradas en los gustos de sus clientas.

En la primer línea de MB predominan formas geométricas básicas junto a orgánicas que comenzaron siendo simples garabatos de la artista. Es sólo de aros, pero la creativa asegura haber comenzado a realizar collares y planea incorporar brazaletes y cinturones.

La estética en redes llamó notablemente la atención. De ésta se encarga María Paz Bonasso, hermana de Milagros y estudiante de diseño gráfico. La pureza, la nitidez y el factor diferencial del Instagram invita a muchos a conocer este nuevo proyecto que entiende que las nuevas vidrieras son digitales.

En poco tiempo Milagros se muda a Buenos Aires a seguir su aprendizaje en joyas. Su idea es también poder tener una experiencia en alguna joyería y dar a conocer su firma, que seguirá presente en Montevideo.

Los proyectos de Bonasso sorprenden siempre por su sello llamativo y diferente, se animan a exagerar, ya sea en forma o en color y, logran satisfacer las necesidades de aquellos que buscan piezas innovadoras. Con sólo un mes en el mercado, la orfebrería de Milagros Bonasso está bajo la lupa de los que consumen y comentan el diseño local y, en DressMix, le damos mucho más que nuestra humilde aprobación.

Junio, 2017.