Una boda mágica

Mágico fue todo lo que tuvo que ver con el casamiento de Magdalena Armas y Gonzalo Muñoz en un atardecer de este Febrero de 2019. Desde la ceremonia en la Iglesia Stella Maris en la que participaron amigos y amigas con comentarios muy íntimos de los novios, hasta el amanecer en la casa de campo de la familia de Magdalena donde fue la fiesta.

La novia, seguramente sin tener la intención de llamar la atención, lo hizo con un estilismo sobrio, elegantísimo, femenino y muy original que combinó una falda amplísima con una blusa de manga corta, diseñado por Burbu Sacco. El make up fue realizado por Vicky Rodríguez Algorta e Inés Carriquiry participó con el diseño del tocado y peinado.

Los invitados fueron llegando a Lomas de Carrasco con la caída del sol. Una tarde de esas que son únicas por la calidez de la temperatura y la luz anaranjada. Mesas largas con guirnaldas de lucesitas, nidos de cotorras, arañas de hiedras y globos chinos insertados en el campo generaron un ambiente cinematográfico.

La madrina, Male Reyes, conocida por sus charlas filosóficas eligió para la ocasión un vestido estampado de Roberto Cavalli. Quizás un estilismo diferente a los pomposos vestidos de madrinas en colores lisos y vibrantes al que estamos acostumbrados, pero como bien dijo Male, ¿Qué es un vestido de madrina? Es que las madrinas son cada vez más jóvenes y la actualización se da en todos los campos.  En moda, la libertad es lo más importante. Que cada madrina elija el modelo que la haga feliz.

Siete años de novios fueron coronados por un casamiento inolvidable, íntimo; entre familiares y amigos, en donde los jóvenes brillaron hasta el amanecer.

Fotos: Bóffano Studios