Casas con encanto es un libro que reúne 17 historias de casas uruguayas con historia y buen gusto. Fue producido por María Noel Maisonnave y redactado por su hija, Federica Bordaberry. Ya está a la venta y esperando para lanzarse.

Por Federica Bordaberry

Seguíamos y seguíamos y Mamá no frenaba en ninguna entrada del camino de tierra. Me había dicho que la primera casa era en Pueblo Garzón pero nos estábamos entreverando entre los terrenos aunque ella me decía que sabía perfecto cómo llegar. Lo cierto es que sabía y me hizo llegar a una tapera remodelada que ahora se llama Dos Belgas. 

Adentro estaba Eva y su delicadeza me encantó. En los gestos, en el habla, en sus pinturas de rostros de mujeres. Como era la primera casa tenía los sentidos demasiado atentos y escuché el viento rumeando en el jardín del fondo y alguna que otra chicharra gritándole al calor de esa tarde de febrero de 2019. Creo que cuando uno comprende la historia de un lugar puede enamorarse fácilmente de él. Elijo la palabra comprender porque no es lo mismo que saber, cuánta distancia entre una y otra y cómo lo aprendí.

A los días, Mamá me llevó a La Rinconada en la playa Solanas. Pero qué va a haber en la playa, pensaba, y asumí que sería una rareza artística de un par de pescadores. Que ingenua desconfiar así de Mamá y ese día me encontré con una casa hecha en una cueva entre rocas. Podría haber sido, sí, una rareza de dos pescadores pero lo cierto es que, en realidad, era la paz de dos personas vuelto hogar. Y el atardecer y la terraza y las paredes que lloraban por la humedad y el ojo de buey que daba al mar. 

Así empezamos y recorrí solo las casas que podía por tema de logística y tiempo. Lo cierto es que cada entrevista presencial o telefónica, cada dueño que abría parte de su vida a la hija de la productora del libro, terminaba entre lágrimas o con silencios muy profundos. No fueron solo casas, fueron casas con encanto que Mamá se dedicó a encontrar día y noche. Y por algo cada una es tan particular, por algo cada una tiene una identidad marcada, por algo cada una tiene hasta el último detalle pensado: son historias, son familias, son amigos, son vidas vividas. 

Sobre trabajar con Mamá, sí, es demandante. Ahí juega la confianza y el vivir bajo el mismo techo. Pasar de ser productora y periodista a madre e hija, qué tarea fue esa. A veces mezclábamos, a veces lográbamos diferenciar. Es complejo, pero es un proceso espectacular. Es conocernos, cada una, en nuestras áreas profesionales, en nuestra seriedad laboral y en nuestra sonrisa de pasión. 

Fueron 17 casas y con todas tuve contacto directo. De cada una aprendí una historia, con cada una me emocioné y la sentí propia. Lo mismo le pasó a Mamá que se dedicó a contactar dueños, a visitar las casas, a revisitarlas con fotógrafos y a seleccionar cada imagen. Y parece poco pero yo la vi sentada frente a la computadora mirando y volviendo a mirar doscientas fotos de un solo lugar. Es que a Mamá le gusta la calidad y por eso fue un honor que me pidiera participar. Mi Mamá considerándome calidad objetiva, no calidad por maternidad. Eso, les juro que eso, es pura satisfacción.

Casas con encanto es un libro que junta no solo la historia de 17 casas, de 17 familias y 17 grupos de amigos sino que, además, junta la historia de una madre y de una hija que solo les faltaba trabajar juntas. 

Por venta del libro contactarse: 

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Instagram: @marianoelmaisonnave