Ella es  la primera mujer en la historia uruguaya y argentina en ganar una carrera puntuable de Motociclismo.

Las mujeres van ganando su lugar dentro del deporte motor y el motociclismo es una de las disciplinas que va reclutando mujeres talentosas. Es el caso de la uruguaya Stephanie “Fefi” Devoto, quien hoy es referente a nivel sudamericano y fuente de inspiración para todas. Ella tiene el privilegio de ser la primera mujer en la historia uruguaya y argentina en ganar una carrera puntuable por competencias fiscalizadas por CAMOD (Confederación Argentina de Motociclismo Deportivo).

Arrancó a los 23 años probando una Kawasaki 600 y desde entonces no paró de correr. Participó en campeonatos de Uruguay, Argentina, Brasil y España. Fue ganadora en el 2017 de la etapa regular de la Federación Bonaerense de Motociclismo y obtuvo un brillante 2do lugar en España, en la categoría “Féminas” de la Real Federación Motociclista Española. 

Fefi es una mujer admirable, bella, talentosa, con pasión y con coraje. Una mujer realmente empoderada que supo competir al mismo nivel que los hombres en una disciplina que hasta ahora era más bien masculina.

Porque además de correr, Fefi sabe de mecánica e interviene su propia moto, metiéndole mano. Aprendió mucho de su cuñado quien la acompañó siempre en su desarrollo como competidora profesional y de su novio Sebastián Martínez, con quien compartió las competencias y la misma pasión.

Al año de tantear la disciplina y empezar a correr en la pista del Autódromo uruguayo, eligió la moto BMW 1000, que según Fefi le resulta muy cómoda y ¡empezaron los campeonatos y el éxito!

¿Cuándo fue que te diste cuenta de que ser piloto de moto era lo tuyo?

Desde el primer momento en que fui a un autódromo a mis 22 años… Ya el día previo que es el día en donde organizamos todo, cargamos las motos, herramientas y demás, ahí supe que tenía más ansiedad y nervios que lo normal. Algo estaba naciendo en mí. 

El momento en el que entré a girar con la moto fue lo que terminó de hacerlo definitivo, esa sensación única de adrenalina, ansiedad, de calor en la sangre, nervios, todo junto. ¡Ese es el estado en el que me gustaría vivir cada día! Y que solamente lo encontré arriba de la moto.

¿Tenés antecedentes de motociclismo en tu familia?

Curiosamente no, mi papá falleció cuando yo apenas tenía 1 año pero a él le encantaba acelerar y los autos, así que seguro lo heredé de él, pero nunca llegó a introducirse en las competencias ni nada de ese estilo.

¿Cómo aprendiste a hacer lo que hacés? ¿Hay escuelas de motociclismo en Uruguay?

Acá tenes que aprender por la tuya, y aún así estás en un nicho muy pequeño, en Uruguay tenemos un mercado muy chico de motos lo que hace que no tengamos opciones a la hora de preparar una moto para correr, tenemos que traer las piezas de afuera por la nuestra, no hay mucha gente especializada en la mecánica tampoco como para poder sacar su máximo rendimiento, es muy difícil vivir en Uruguay, ¡para todo! 

¿Pensás en algo cuando corres a alta velocidad? ¿Pasan cosas por tu mente?

Si, en ganar. Siempre voy concentrada en todo lo que va pasando, en ver el cartel que me marcan en la recta que es el que tiene toda la información de lo que pasa atrás y adelante tuyo y la cantidad de vueltas restantes, en base a eso vas organizando tu plan de carrera.

¿Cuál fue el máximo de velocidad a la que llegaste?

Esa es la pregunta que siempre me hacen jaja… 320 por gps. 

¿Cómo manejas el miedo a tener un accidente? ¿Tuviste algún accidente grave?

El miedo lo tienen los de afuera, yo no corro con miedo. Accidentes tuve varios pero por suerte nunca nada grave, tenemos muchas protecciones que son muy seguras así que confío mucho en ellas. Y en mi caso soy muy responsable con la seguridad, cuando se me rompe un casco o el mono (“el mono” es el traje que usamos) los cambio.

¿Quiénes son las personas que te acompañaron y que te apoyan?

Mi familia, somos un equipo hermoso porque hacemos todo el trabajo en familia, mi pareja hace 20 años o más que corre, él me da los mejores consejos y me ayuda mucho siempre. Mi cuñado es el mejor mecánico de Argentina, me ha enseñado un montón a entender la moto y saber lo que necesito para que funcione mejor. Mi otro cuñado que es el que nos ayuda con todo el armado del box y demás, que todo lleva mucho trabajo. Mi suegro nos ayuda manejando porque en Argentina las carreras son a 1.000, 2.000 km a veces y hay que ir siempre por tierra obvio. Y mi suegra siempre nos cocina cosas ricas, así que también participa desde ese lugar tan importante para nosotros, jajaj. Realmente tenemos algo muy hermoso.

¿En qué campeonatos nacionales e internacionales participaste?

En el campeonato Uruguayo del cual quedé subcampeona el primer año que corrí y el segundo año lo gane. El campeonato Argentino, El Campeonato Febom (es un campeonato Bonaerense de Argentina) que también quede subcampeona, en el campeonato Brasilero “Superbike Series” pero solo corrí algunas fechas porque era mucho presupuesto. Corrí en el campeonato Español femenino que tampoco lo pude hacer completo, también en España participe de algunas carreras de un campeonato menor entre hombres quedando dentro del top 10.

¿Qué diferencias tienen las categorías velocidad, enduro, motocross y Trial?

El terreno, obviamente son diferentes modalidades. Usamos diferentes motos, diferentes velocidades pero todas son igual de difíciles y llevan su preparación. Por ahí una gran diferencia es cuáles pistas de motocross o enduro son más accesibles para poder ir a girar, en cambio los circuitos donde giramos nosotros son casi inaccesibles, es muy difícil entrenar para nosotros arriba de la moto, de hecho muchos de la velocidad entrenan en motocross porque a nosotros nos ayuda bastante físicamente y es más accesible y menos costoso.

¿Qué pasa con las carreras y el Covid 19, está autorizada la actividad?

Hoy en día no se está organizando el campeonato Uruguayo por falta de plazas, cada vez se hacía más difícil económicamente hasta que se decidió no seguir organizándose. En Argentina recién ahora en abril arranca el campeonato, el cual por temas protocolares se va a disputar todo el año en el circuito Galvez en Buenos Aires. 

¿Qué diferencias hay entre correr en América del Sur y correr en Europa?

La misma que con todos los deportes, allá es un paraíso, te caes, rompes algo y tenes camiones vendiéndote repuestos ahí mismo, acá rompes algo y si no tenías vos repuesto te quedas sin correr. La organización es de primer mundo, es todo accesible, hay escuelas de motociclismo, hay centros donde los chicos se establecen unos meses y tienen autódromos para girar todo el día, tienen gimnasios, control nutricional, te enseñan todo. No tenemos ni para empezar a hablar nosotros.

¿Cuál es el circuito o la pista que más te gusta?

Tengo 2… El primero por un tema sentimental es el circuito de BS AS, “El Galvez”, pero también amo Aragón, España, estar andando al lado de esa muralla, el trazado super complejo, la recta interminable, la frenada de la curva 1, ¡me encanta ese circuito!

¿Qué tipo de entrenamiento es necesario para estar en condiciones de competir?

Cuanto más exigente seas con tu entrenamiento mejor, yo hacía mucha coordinación, propiocepción, fuerza y aeróbico. 

¿Viviste situaciones de discriminación por ser mujer?

Si, varias. Siempre hay maniobras sucias de querer tirarte a propósito, lo bueno es que ya estoy super curada de espanto. Igual me fui ganando mi lugar al punto de que hoy me siento super respetada y querida. 

Si te gustan las motos te deben gustar los autos, ¿cuál es tu modelo preferido?

No tengo pasión por los autos, ¡pero me gustan! Sobre todo el mío, soy amante de Mercedes y tengo un a45s Amg. 

¿Qué aspectos técnicos o de diseño, te parecen fundamentales en un auto?

Priorizo que tenga tracción integral, me siento muy cómoda cuando lo tiene. Mi primer auto fue un Mitsubishi Evo 9 por ende me hice en un integral. Me gusta cuando son motor chico y bueno, no esos Americanos que tienen mucho motor pero no los ayuda nada, pesan un montón, son una lancha. Tiene que ser una carrocería ágil, liviana. 

¿Cuál es tu próximo desafío?

La realidad es que me gustaría volver a correr cuanto antes, poder estar de nuevo arriba de una moto sintiendo esas sensaciones. Hoy por un tema económico, de organización y compromiso no lo puedo hacer pero apenas tenga una oportunidad ¡la tomo!

¿Cómo ves en general, a las mujeres hoy?

Me encanta que nos estemos animando a todo, sin importar lo que pase, como nos trate o cuánto nos cueste, me gusta ser de esta generación donde la mujer pisa fuerte. No soy partidaria de la guerra entre mujer y hombre pero sí de que la mujer tenga un lugar en donde quiera estar.

¿Una película?

Iron Man.  

¿Una canción?

Pillowtalk de Zayn. En el momento previo a largar una carrera solía escucharla para entrar en foco y concentración.

Fotos gentileza: Fefi Devoto

Fotos test GLA: Franco Rico

#MujeresPoderosas