Mishka sorprende con un ecléctico mix de tendencias, estampas y accesorios a los que no te podrás resistir
Los coloridos turbantes en la pasarela de Mishka en la BAF Week fueron sólo la frutilla de la torta que hicieron de la última colección, la más destacada de la semana de la moda en Buenos Aires.
“Chelo” Cantón y Diego Trivelloni son arquitectos y socios hace años. En el 2001 emprendieron Mishka, el primero dedicándose a la parte creativa y el segundo al área comercial. Al principio, la marca se focalizaba exclusivamente en calzados. Hoy, si bien son su producto destacado, la firma cuenta con una amplia propuesta de indumentaria y, sus emprendedores, se siguen definiendo como arquitectos.
La última puesta en escena de Mishka demostró nuevamente estar a la altura de las colecciones de las semanas de la moda europeas, al igual que otras pocas pero destacadísimas marcas argentinas.
Lo que más gusta de Mishka es esa capacidad que tiene de adoptar las nuevas tendencias con su característico sello y ese talento de lograr una síntesis entre lo lúdico y lo conceptual para convertir la línea en una propuesta sumamente comercial.
Los colores primarios, el rosado claro, el ladrillo y el pistacho son los colores del verano que la marca adoptó para su propuesta. La nueva temporada se viene más colorida que nunca, y la firma lo muestra en sus estampas.
Las rayas y los motivos geométricos contrastan con floripones de impronta artesanal en diseños digitales sublimados. A su vez, sorprenden broderies, prendas en patchwork y terminaciones flecadas dándole un acento latino o romántico a la propuesta limpia y étnica.
Lo más destacado fueron los accesorios y los estilismos. Los turbantes y los exóticos sombreros le dieron carácter a la colección, al igual que los importantes collares, las llamativas caravanas y las coloridas sandalias que serán, al igual que los bolsos, el objeto de deseo de este verano.
Por TheStrawberryBlonde
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