Pensar Verde; Otra Oportunidad

Por Maria Gomensoro

Tiene 82 años. Va vestida con una elegante chaqueta roja y lentes de sol oscuros, que nunca se sacará y camina esposada junto a otras tantas personas que se encontraban manifestando en las escalinatas del Congreso de Estados Unidos, para reclamarle a su gobierno que actúe contra el Cambio Climático y se sume al New Green Deal, un paquete de políticas que buscan reducir las emisiones de carbono y el que piden por el  abandono del uso de combustibles fósiles. Una utopía para muchos. Un imposible. Un sueño.

Esta señora, es Jane Fonda. Activista y leyenda de Hollywood. Esta será la cuarta vez que pasara la noche en la cárcel, pero ella asegura que no va a ser la última. Ella sabe que su cuerpo de 82 años es su escudo y su celebridad, lo mejor que puede poner a disposición de la causa, que ya moviliza a millones en el mundo entero.

Jane Fonda manifestando en Green New Deal

Inspirada en la movida que inició la sueca Greta Thunberg, esta “cuestionada”  adolescente de 16 años que se propuso la titánica tarea de abrirle los ojos al mundo ante la inminente catástrofe ambiental y climática si es que no actuamos rápido, se sumó a los “simulacros de incendio de viernes”. Aprovechará su estadía en Washington debido al rodaje de su altamente recomendada serie en Netflix: Franky & Grace y hasta mediados de enero marchará todos los viernes hacia el Congreso.

Greta Thunberg

Pero Jane va más allá y se sirve de las cámaras y el revuelo mediático que genera su arresto para soltar un juramento: “Este saco rojo que ven que tengo puesto, es la última prenda que comprare. Tenemos que ser conscientes de que el consumismo nos está destruyendo”.

Esta frase me quedo retumbando en el alma. Y me sentí culpable…

Para alguien como yo que tengo una clara tendencia a la compra impulsiva y compulsiva, prometer que la de ayer fue la última compra es casi un imposible. Pero la realidad nos está pidiendo y exigiendo un cambio de mentalidad.

Las propias empresas de moda, las grandes marcas del fast fashion incluyen campañas de reciclado: “traé lo que ya no usas y te hacemos un descuento en tu compra.” La cantidad de tiendas de segunda mano que en Uruguay crecen cada vez más, captando  al cliente que cuida su bolsillo y también el medio ambiente, y también las ferias de moda, como es el ejemplo de Otra Oportunidad, donde marcas de diseño regional sacaron a la venta prendas de colecciones pasadas y donde un puñado de modistos y modistas ofrecían hacerle las modificaciones a las prendas que nos queríamos llevar o alguna pieza que quisiéramos reformular.

Si tenes un poco más de 40 años podrás recordar que algunas familias recibían semanalmente a la modista que venía a arreglar, zurcir, alargar ruedos, acortar y achicar, desde pantalones hasta vestidos. Así usé las kilts de mis hermanas y hasta vestidos de fiesta que habían sido de mi madre o de mi abuela. Un tiempo donde se comparaba poco pero bueno. Un tiempo al que habría que volver, un tiempo al que hay que volver, para seguir teniendo tiempo en esta tierra.

Fotos: country living.com / thedailybeast.com / La Nación / thetyee.ca / infalible.es / religionnews.com / commondreams.org

http://comerciojusto.org/publicacion/guia-para-el-consumo-responsable-de-ropa/