La muestra de Ana López en Garzón.
Por Elaiza Pozzi
Llegar a Pueblo Garzón en un atardecer de Diciembre es encantador. Es el marco perfecto para un baño inmersivo de arte en la vanguardista galería Walden Naturae con una creativa, fresca y colorida exposición vinculada al mundo marino.
Pueblo Garzón se ha transformado en un nuevo ecosistema cultural donde el arte, la gastronomía y la naturaleza forman una experiencia única para el turismo. Un ambiente y un espacio en el que el tiempo parece detenerse para dar lugar a nuevas ideas y propuestas artísticas. La idea de pensar la relación de los humanos con el planeta, con otros organismos y especies diferentes cobra relevancia en un mundo en crisis climática.
Ana López, Lecho Marino. Walden Naturae.
Desde esta perspectiva la muestra “Lecho Marino” de la artista española Ana López propone un paisaje de mar de Finisterra con pinturas, dibujos y esculturas de cerámica de un universo original y colorido, donde aparecen cangrejos, pescados, piernas de mujeres, flores carnívoras, hongos con bocas, estrellas de mar y otras combinaciones de plantas y animales marinos e imaginarios. En palabras del curador Santiago Villanueva; “Ana presenta un fondo de mar que confunde las geografías. Continúa una historia ya iniciada donde sigue teniendo protagonismo la sirena, tal vez sus surgimiento, como en el libro “La sirena que Manuel Mujica Lainez presenta en 1950¨. La muestra está acompañada además por “La Sirena”, un poema de Marta Dillon.
En Walden Naturae se desarrolla un programa anual que combina exhibiciones históricas y contemporáneas en todas las disciplinas mediante propuestas artísticas, agrícolas y ecológicas que cultivan el diálogo con un entorno único, y fomenta el intercambio permanente entre artistas de distintas generaciones.
Ana López, Lecho Marino. Walden Naturae.
Dirigido por Ricardo Ocampo, fundador también de W-Galería en Buenos Aires, y con una superficie de 500 m2, su objetivo principal es integrar la experiencia de la galería al entorno de Garzón, a través de un constante diálogo entre el arte y la naturaleza.
En 2023 se integrará un programa de residencia para artistas y coleccionistas. Contará con un taller propio para que el artista residente pueda realizar sus prácticas artísticas y de investigación, y que culminen en un proyecto para la galería.
Ocampo describe el devenir del surgimiento de la galería y su objetivo, “quería construir un espacio alejado de los circuitos comerciales tradicionales, y por eso elegimos este lugar. Con este fin, hace cinco años se adquirieron las tierras donde se construyó nuestro espacio. En este momento estamos trabajando en el desarrollo de una residencia para artistas que promueva el intercambio, permita establecer un vínculo entre la escena artística uruguaya y la internacional.”
