El almacén de Andy by Andrea Morisio ofrece una colección única de vajilla vintage y cristalería. Una selección de piezas antiguas exquisitas para incorporar a la decoración de la casa.

Su pasión por la vajilla se despertó los jueves de su infancia en los que visitaba a su abuela a la hora del té, quien la recibía a ella y a sus primas con una mesa en tonos rosados. Andrea Morisio, de treinta y nueve años, emprendió en febrero del año pasado El Almacén de Andy, un proyecto que consiste en el alquiler de vajilla vintage para eventos.

El emprendimiento comenzó cuando Morisio decidió alquilar para un evento, parte de una colección que tenía en su casa, y obtuvo una respuesta más que positiva en retorno. “Me encanta lo que hago y la gente que me alquila aprecia de la misma forma que yo la loza” asegura.

Por el momento, su vajilla es de porcelana y tiene algunas piezas de cristalería. “Mi preferida es la porcelana inglesa, es la que predomina en mi colección” cuenta. Tiene piezas tanto para desayunos y tés, como para cenas y almuerzos. En un futuro, le gustaría poder tener todos los elementos para completar una mesa: cubiertos, mantelería y más cristalería.

Su vajilla es toda diferente. “Es parte de rescatar y reutilizar lo que nuestras abuelas y madres tenían archivados en muebles. Sobre todo nuestras abuelas, no usaban juegos incompletos” afirma. Lo que más le gusta es armar las combinaciones de piezas para sus clientas. Algunas, le hacen pedidos especiales, como toda la porcelana en un tono de color o específicamente floral.

Andrea alquila tanto para eventos íntimos como multitudinarios. El año pasado, llegó a cubrir un evento para doscientas personas con vajilla antigua, pero este año, su objetivo es poder cubrir uno con el doble de comensales.

La emprendedora recorre ferias y mercados en búsqueda de preciadas piezas añejas. Cuando viaja, nunca deja de traerse algo de afuera. Hace años viene juntando vajilla y, el año pasado, encontró la forma de convertir su pasión en profesión. “Recuerdo que desde chica observaba con asombro el despliegue de vajilla que se realizaba en mi casa principalmente en las fiestas. Vivir rodeada de esto creo que fue lo que despertó este gran aprecio que tengo”.

Los proyectos que reviven el valor de piezas antiguas y delicadamente trabajadas son pocos hoy ¡y muy admirables! El Almacén de Andy, como todo buen emprendimiento, nace de una pasión y, es sin duda un dato a tener en cuenta. ¿Cuántas veces invitamos y nos damos cuenta que nos quedamos cortos de vajilla? ¡Anoten! Instagram: @elalmacendeandy Facebook: El Almacén de Andy Web: www.elalmacendeandy.com

Por Camila Galfione