Sensual, atrevida y contemporánea.

Para celebrar el 250 aniversario de la creación de The House of Creed, el maestro perfumista Olivier Creed creó Aventus. Un best seller contemporáneo internacional que representa la fuerza, el poder, el futuro y el éxito.

Una Eau de Parfum idónea para los hombres clásicos. Aventus evoca la elegancia actual.  Sensual, atrevida y contemporánea, esta intensa y emblemática Eau de Parfum combina tentadoras notas de salida de limón, pimienta rosa y bergamota italiana con notas complementarias de corazón frescas y florales de piña jugosa, jazmín dulce y pachulí de Indonesia.

Para una máxima experiencia olfativa, completan esta atrevida y elegante fragancia las notas de fondo amaderadas de musgo de roble, cedro y el ingrediente firma de The House Of Creed, el ámbar gris.

The House of Creed es una casa genuina y de lujo dedicada a la creación de fragancias de gran originalidad, fabricadas a partir de exquisitos ingredientes. La historia de la marca comienza en 1760, cuando una nueva casa de confección londinense recibe un encargo de un par de guantes de cuero perfumados por parte del rey Jorge III. Fundada por James Henry Creed el mismo año de la llegada al trono del joven rey, The House of Creed lleva creando fragancias para los clientes más selectos y exigentes durante más de 260 años.

Creed era la tienda de la mayoría de la realeza de la época. En el recientemente constituido Segundo Imperio de París, Creed adquirió una gran reputación por su confección de alta calidad y por la exclusividad de sus fragancias personalizadas exclusivas y limitadas.

El tacto y la discreción con la que se trataba a la clientela aristocrática y de la alta sociedad, se convirtió rápidamente en parte de la leyenda de Creed. Creed ha seguido creando un legado de fragancias inigualables. La familia Creed ha elaborado durante siglos alrededor de 200 perfumes manteniendo su espíritu creativo único y su pasión por las fragancias, que se ha transmitido de padres a hijos durante siete generaciones.

En la actualidad, Olivier Creed, creador perfumista y descendiente directo de James Henry Creed, continúa esta gran tradición.

Olivier viaja por todo el mundo junto con su hijo Erwin, para obtener, investigar, seleccionar y encargar la mejor materia prima. Rosas de Bulgaria, Turquía y Marruecos; jazmines de Italia; iris de Florencia; nardos de India; vetiver de Haití; vainilla Bourbon de Madagascar; bergamota de Calabria y violetas de Parma. Esto es solo una parte de los tesoros de los laboratorios Creed.

Todavía ubicada en París, con una fábrica en Fontainebleau, la marca Creed elabora gran parte de sus propias esencias utilizando una técnica tradicional, un proceso que las otras marcas han abandonado por su elevado coste, y que marca toda la diferencia de las fragancias Creed. Las materias primas naturales de gran calidad todavía se pesan, mezclan y maceran mediante procedimientos manuales.

Este proceso es muy laborioso pero Creed no quiere prescindir del arte y la perfección.