Diseño de joyas 

Aquella tarde al golpear la puerta en Andes 1530 nunca imagine encontrarme con tan cálida mujer. Nilda Echenique me recibió con una gran sonrisa y su delantal de trabajo puesto, estaba- como quien dice “con las manos en la masa”. Me invitó a pasar a su taller y automáticamente me transporté a las viejas fotografías en blanco y negro de grandes artistas en sus propios talleres. Allí en sus mundos privados y desordenados en donde solo de esa manera la creatividad podía surgir por completo.

Sus piezas, collares la mayoría, se caracterizan por combinar metales como la plata, cobre, madera y piedras semi-preciosas.

Antes de dedicarse a las joyas Nilda hizo tapices hasta 1991 cuando ALCAN (Aluminios del Uruguay) organizó un concurso y ella junto a unas compañeras ganaron un importante premio, desde ese día se entusiasmó con los metales y comenzó a estudiar orfebrería con el profesor Alan Pose. Sus primeras joyas eran de aluminio. “Busco en principio originalidad, creo que me define el trabajo con diferentes calados y la utilización de madera”. A la hora de usar piedras semi-preciosas Nilda se inclina por las nacionales.

Ella es madre de tres hijos y tiene cinco nietos, pero cuenta que ninguno se inclina por la orfebrería por ahora. Un genuino ejemplo de como las vocaciones pueden llegar a cualquier edad y hay que abrazarlas sin miedo.

 

Agosto, 2016.